Galletas

Ingredientes:

50 gr. de mantequilla sin sal

60 gr. de azúcar moreno

Entre 150-200 gr. de harina de repostería

1 huevo

2 cucharas de levadura en polvo royal

1 cuchara de esencia de vainilla

1 cuchara de yogurt de fresa o frutos rojos

La ralladura de un limón (sólo la parte amarilla, porque lo blanco amarga)

Preparación:

Primero levantamos la clara a punto de nieve, vamos añadiendo poco a poco el azúcar sin parar de batir hasta que se mezcle bien, debemos batir hasta que no se vean los granitos del azucar.

Incorporamos la rayadura de limón y la esencia de vainilla y seguimos batiendo.

Añadimos la mantequilla derretida y seguimos batiendo.

Añadimos la yema y  seguimos batiendo.

Añadimos la cuchara de yogurt y seguimos batiendo.

Añadimos la levadura y seguimos batiendo.

Ahora vamos a ir añadiendo la harina tamizada poco a poco a la mezcla anterior, para tamizar la harina debemos echarla con ayuda de un colador, seguiremos mezclando sin parar a medida que vamos echando la harina. Llegará un momento que la única forma de seguir mezclando sea con las manos.  Seguiremos echando harina tamizada hasta que la masa ya no se nos peque a las manos, sino que quede totalmente consistente y podamos hacer una bola. Amasamos un poco con las manos y hacemos una bola que envolveremos en film transparente y dejaremos reposar en la nevera 1 hora.

15 minutos antes de hacer las galletas, sacamos la masa de la nevera para que esté a temperatura ambiente y podamos moldearla bien.

Amasamos bien la bola con las manos, echamos harina en una superficie plana y estiramos la masa con ayuda de un rodillo hasta que tengamos como medio centímetro de grosor.

Entonces comenzamos a hacer las formas con ayuda de moldes. Lo que va sobrando se junta, se hace de nuevo una bola y se vuelve a estirar con el rodillo, para seguir haciendo formas.

Precalentamos el horno a 180º, es importante que el horno ya haya alcanzado esta temperatura cuando metamos las galletas.

Colocamos las formas de galleta en una bandeja de horno bien separadas  y sobre papel de hornear, para que no se peguen.

Dejamos hornear durante 10 minutos y sacamos inmediatamente las galletas para que se enfríen.