Tortilla de calabacín

13.01.2013 17:38

Ingredientes para 2 personas (sale una tortilla de unos 18 cm de diámetro):

1 calabacín y medio

3 huevos medianos

Media cebolla

Aceite de oliva

Sal

Y lo más importante de todo: una buena sartén antiadherente!!!

 

Preparación:

Pelamos el calabacín y lo cortamos en finas láminas (tranparentes) y no muy grandes, como hacemos con las patatas para la tortilla de patatas tradicional. Lo salamos y reservamos

Por otro lado picamos la cebolla muy pequeña y finita y también reservamos.

 

En una sartén grande (distinta de la que vamos a utilizar luego hacer la tortilla) echamos abundante aceite, calculando que el aceite cubra todo el calabacín.

Ponemos a fuego fuerte y cuando coja temperatura añadimos el calabacín y bajamos el fuego para que se vaya haciendo a fuego lento (casi confitando), de vez en cuando removemos con una cuchara de madera o espumadera para que se vaya haciendo de manera uniforme. A los 7 minutos añadimos la cebolla y mezclamos. Lo dejamos hasta que el calabacín y la cebolla estén blanditos, pero no tostados.

 

Una vez esté listo sacamos de la sartén escurriendo muy bien con ayuda de una espumadera y lo pasamos a un plato. Observareis que el calabacín suelta mucha más líquido que la patata por lo que cuando esté en el plato todavía quedará mucho líquido a pesar de haber escurrido. Inclinad el plato y ayudaros con la espumadera para sujetar el calabacín al tiempo que vertéis el líquido, hasta dejar el calabacín completamente seco.

 

En un bol o recipiente grande, cascamos los 3 huevos, añadimos sal y los batimos con un tenedor hasta que la yema y la clara queden perfectamente integradas. Ahora añadimos el calabacín y la cebolla a los huevos e mezclamos con el tenedor.

 

Debe quedar el calabacín flotando en el huevo, si sobresale mucho calabacín y tapa el huevo es que debéis añadir más huevo.

 

Cogemos nuestra sartén antiadherente (yo he utilizado una de 18 cm porque prefiero que la tortilla quede gordita), añadimos un chorro de aceite de oliva y ponemos a fuego fuerte para que el aceite coja temperatura. Cuando suba la temperatura (no que queme ni que salga humo, simplemente que deje de estar frío) volcamos todo el calabacín mezclado con el huevo y bajamos el fuego al mínimo inmediatamente.

Con una cuchara de madera removemos durante el primer minuto, pasando la parte que está en contacto con el fondo de la sartén  arriba y la de arriba abajo, para que el huevo cuaje uniformemente.  Después del primer minuto, dejamos que cuaje despacio sin tocarlo.

 

Cuando veamos que el huevo de la parte superior ya no está líquido, será el momento de darle la vuelta.  Os aconsejo muchísimo comprar una tapa de plástico vuelca tortillas, es completamente plata, no pesa nada y tiene un asa que os permite sostenerla muy bien para darle la vuelta. Aunque seáis principiantes en esto de hacer tortillas con este utensilio no se os destrozarán al darles la vuelta.

Si al darle la vuelta, observáis que la sartén está casi sin aceite añadid un chorrito. Colocad de nuevo la tortilla por este otro lado y dejad unos minutos a fuego lento. Está casi hecha por lo que tendrá que estar muy poco tiempo, lo justo para que esta parte se dore un poco.